La estadounidense Carli Anne Lloyd –actualmente Hollins, debido a su matrimonio con su esposo Brian- es una mujer que, sin lugar a dudas, marcó una época en el fútbol: la época dorada del conjunto de las Barras y las Estrellas: Estados Unidos. Con 39 años de edad, Carli decidió cerrar su etapa en activo como futbolista profesional tras un último gran hito con su selección: la medalla de Bronce en Tokio 2020.
Tras 17 años de formar parte de la élite del fútbol, Lloyd pone fin a su carrera deportiva con logros históricos –no sólo para ella, sino también para toda su Selección- en donde se destaca el haber sido dos veces ganadora del premio a “Jugadora mundial del año” por la FIFA, así como el haber conseguido 2 preseas olímpicas y 2 copas del mundo –En Canadá 2015 y en Francia 2019-.
Nacida en 1982, un 16 de julio, en Nueva Jersey, Estados Unidos, Carli comenzó su carrera como centrocampista –y en ocasiones como delantera- a los 5 años, jugando en equipos mixtos, como las grandes leyendas de los últimos años. Inspirada por ver el fútbol femenil en el mundial de 1999 en Estados Unidos, decidió dedicar sus esfuerzos para consolidarse en la élite del deporte, lográndolo a los 18 años con su primer gran reconocimiento: ser nombrada dos veces miembro del primer equipo del Star-Ledger All-State, así como recibiendo honores en el Parade All-American igualmente.
En su etapa universitaria jugó para la Universidad de Rutgers, siendo la primera atleta en conseguir estar durante 4 años consecutivos en el primer equipo de la Big East. Además, logró ser la máxima anotadora de su equipo durante su etapa colegia, llevándose el premio de “Novata del Año” y llegó a ser nombrada All-Star Academic de la Big East.

Hizo su debut en el año 1999, cuando aún estaba en la etapa de preparatoria, con el equipo los equipos Central Jersey Splash, New Brunswick Power y South Jersey Banshees, en donde conoció a figuras con las que compartiría vestidor en un futuro en la selección, como Tobin Heath. Al concluir su etapa universitaria, fichó para el equipo de los Red Stars de Chicago, donde comenzó su aventura profesional.
Su paso por selección nacional fue épico y de los más recordados. Hizo su primera aparición con selección mayor en el 2005 contra Ucrania, llegando a consolidarse para el 2006 en el torneo de las Cuatro Naciones. Con un total de 312 juegos con el conjunto nacional –en donde únicamente perdió 17 de ellos- Lloyd finaliza su carrera con un palmarés digno de admirar y añorar:
Copas del mundo: 1 tercer lugar, 1 subcampeonato y 2 campeonatos
Juegos Olímpicos: 2 medallas de Oro y 1 medalla de Bronce
Preolímpicos y Premundiales: 3 campeonatos y 1 tercer puesto
Igualmente, en su palmarés individual, se destaca el haber obtenido premios como: Futbolista del año de E.E.U.U en 2008, el Balón de Oro del mundial, la Bota de plata del mundial, el Balón de Oro y gol del año de CONCACAF en 2015 y el premio “The Best Femenino” de la FIFA en 2016.
Con esto, Carli Lloyd es de las primeras de una gran generación –que compartió con extraordinarias futbolistas como Alex Morgan, Tobin Heath, Megan Rapinoe, entre otras- en decir adiós a su etapa como futbolista profesional. Si bien aún le quedan algunos partidos con su club, el NJ/NY Gotham FC, estamos seguros que, la época dorada que vivimos como aficionados, será una de las más recordadas y que Carli Lloyd fue baluarte y artífice de la misma.