
FOTO: América Infantil
El 5 de diciembre de 2016 fue un día histórico para el futbol femenil mexicano, con el anuncio de la creación de la primera liga profesional en México, en voz del presidente de la Liga MX, Enrique Bonilla ante los medios de comunicación.
Aquel día, Bonilla expuso que los clubes de la Primera División estaban obligados a formar su escuadra femenil, aunque la fecha de inicio quedaba desierta, sólo se estipulaba que primero se jugaría un torneo de Copa y después comenzaría el torneo. Además, el titular de la Liga explicó que todas las jugadoras debían ser mexicanas y agregó que existía la posibilidad de que las México-americanas se integraran a los equipos, pues tenían la doble nacionalidad, sin embargo, esta norma se anuló posteriormente.
La primera Liga en México era una asignatura que se debía empezar a cursar, sobre todo porque cuando se hizo el anuncio, ya Colombia llevaba sus planes avanzados para comenzar su primer torneo de la Liga Águila, por lo que el balompié azteca no podía quedarse atrás.
Para los aficionados a esta disciplina la espera fue larga luego del anuncio, pues los equipos comenzaban a definir sus proyectos a cuentagotas, salvo excepciones como Xolas (que ya tenía una base y el respaldo del equipo desde tiempo atrás), Pachuca o América, quienes se tomaron en serio el compromiso que estaban adoptando.
La lentitud de los clubes por formar a su representativo femenil se notó para la Copa MX, que se llevó a cabo del 3 al 6 de mayo en las instalaciones de la Nueva Casa del Futbol de la Femexfut, en Toluca, Estado de México: sólo participaron 12 escuadras.
De inmediato destacaron los que llevaban más tiempo trabajando: Xolas, Pachuca, América y Toluca; incluso, las Diablas hasta sostuvieron encuentros con las Selecciones nacionales juveniles, un fogueo importante para ellas, lo que las llevó a ser protagonistas del torneo de Copa.
De los mencionados, fueron Águilas y Tuzas las que más reflectores acapararon, y es que las de Copa golearon a Monterrey y a Pumas en las primeras jornadas; mientras que las de Hidalgo hicieron lo propio sobre Chivas y Monarcas; para el tercer día de actividades, se esperaba que estas escuadras sellaran su pase a la final al colocarse como líder y sublíder del torneo. Pachuca cumplió, pero las azulcremas no pudieron contra Tigres, que no quiso despedirse del torneo sin hacer la maldad a las dirigidas por Leonardo Cuéllar.
La eliminación del América desató críticas al sistema de competencia, pues no permitió que los que la gente consideraba “los mejores equipos” del torneo llegaran a la final, duelo en el que Pachuca arrolló 9-1 a Xolas de Tijuana, un marcador que no dejó en claro el nivel de competencia del futbol femenil, pero por lo menos comenzó a hacer ruido sobre la próxima liga profesional.